lunes, 27 de septiembre de 2010

ECOTURISMO Y SENSUALIDAD: RIVIERA MAYA


De viaje con Madame Manglar;
del periodismo ecológico al descaro absoluto por el placer compartido...


Por Gaudelli: Para la cristalina Sosul, la camaleónica Arce, la tia Eli, el siempre cordial Pericles, Alf el indómito viajero todo terreno del tiempo, el flaco de oro, el implacable Leo, al imprescindible chaman-puerquito, y claro al Apa...


.... No éramos la comunidad del anillo de Tolkien
.... No éramos el ka-tet de Roland buscando La Torre Obscura de S. King

.... ¡Pero nuestros antepasados dirian que fuimos lo mas cercano a una tribu sedienta por encontrar algo para alimentar el oficio de la comunicación!...

Al fin profesionales de la información: intrépido equipo dispuesto a trabajar y también un ético grupo humano que encontraría –a veces de la manera mas divertida-, las dimensiones propias de un mundo fantástico; individual y compartido...

Fideicomiso de Promoción de la Riviera Maya:
¡EL PARAÍSO ES PARA SIEMPRE!


Hace muchos años, -cuando no era madre de mis dos cachorros-, tuve margen de acción para viajar. Me enamoré de cada paisaje –y uno que otro actor en el paisaje-, pero realmente me enganche en distintos lugares.

Después hubo que “hacer tierra”, un “ile” para mi y mis retoños.
Hasta que gracias a mi productor de radio Mario fui invitada a cubrir una serie de sucesos que esta dando pie el Fideicomiso de Promoción de la Riviera Maya.

Redescubriendo mi amor por tierras lejanas, quedé prendada nuevamente del hogar de los mayas; de esa extensión del paraíso en donde cada ser vivo habla un lenguaje que puede ser traducido en el alma., un lenguaje que curiosamente coincide con el que los antepasados yorubas manejaban su propia cosmovisión: así los cenotes, ese puente para entrar a rendirle a los que permanecen en vigilia; donde se mira donde los ojos no pueden ver y se escucha donde las palabras pierden sentido.

.... Hace mas de 20 años un grupo de exploradores, buzos profesionales en su mayoría, me permitieron acompañarlos a un viaje de reconocimiento, por obvias razones me convertí en el “experimento de sobrevivencia”, pero no al clima extremo –de aire acondicionado ¡ni hablar!-, ni a la falta de un par de paredes – ¿un hotel?, ja-.

No, en realidad debía sobrevivir a la cantidad de estímulos, a la energía que se desborda dentro y fuera de uno..., porque los lugares tienen memoria y basta con un descuido para que los recuerdos milenarios se te acurren en la piel y te acaricien como terciopelo mojado..., ...

Con un saber que deja el alma en vilo, por saberse en “Ifaeyelele”, que significa en yoruba lo mismo que para muchas culturas: cuando los obstáculos personales son vencidos y se logra la unidad con la naturaleza: en paz. En armonía con todas las naturalezas, bajo la gracia divina de la fuerza de la creación y de manera perfecta.


RIVIERA MAYA – 20 AÑOS DESPUES

Dedicar estas reflexiones al penúltimo equipo de trabajo con el que me ha tocado viajar tiene una razón muy clara, si bien no demérito el convivio con otros compañeros, fue con estos con quienes traje de regreso el animo ante las décadas y sus efectos.

Al lado de estos periodistas y yo ya con mi estafeta de “periodistamedioambiental” entendí de cierto, que no se trata de una frase panfletaria creada por una excelente agencia, ¡es cierto!: ahí, en ese extremo de nuestro país: “EL PARAÍSO ES PARA SIEMPRE!”

Mi primer viaje –ese que reitero de hace 20 años-, marcó el inicio de una relación épica para mi: Playa del Carmen, entonces era apenas un poblado de tierra pisada, perfecta para aquellos que nos negábamos a “vivir el glamour” de Cancún y que buscábamos evidentemente algo distinto....

En su momento encontré ruinas que ni siquiera eran contempladas en el mapa de recorridos oficiales (LAS RUINAS DE XELHA) sobre la carretera, pero del lado opuesto al mar.

También visite por primera vez la entrada al inframundo maya, sus puertas cuánticas, sus pasajes astrales donde no necesariamente te das cuenta de que cambia algo en ti, pero lo hace....

Apenas una jovencita, de talante un tanto adusto y de temperamento explosivo, aprendí a mirar el universo bajo el agua y aprendí también de la sensualidad infinita que ofrece el regocijo de vivir dentro del estuche propio...

El recuerdo de aquel otro viajes no se mezcla con los de ahora sencillamente porque fue otra época, una en la que para mis percepciones todo era tan nuevo casi inasible, de mis compañeros de entonces me quedan anécdotas, y mi regocijo ahora cuando regreso y reencuentro que los rostros de la búsqueda tienen gestos infinitos...


MADAME MANGLAR

Este alterego, nació, dicho sea de paso, porque desde los noventas cambie cualquier versión de traje de baño por las mas pequeñas tangas.

Y aclaro: eso es importante, pues aunque pareciera absurdo, -y acepto que en otras connotaciones ya me había pasado-, la verdad es que la ropa estorba..., esto puede no ser interesante, pero, bueno, al fin es mi relato, así ¿qué pues?

... Pero lo divertido de esta “madame” es que se dedica a regentear el gozo y el descaro absoluto para si misma, entre ello: mirar a sus compañeros acariciando el torso de un hermoso manatí recuperado de una bañera en Tabasco -y que ahora vive felizmente en una reserva- , o no perder detalle de cómo uno de los mas profesionales fotógrafos se zambulle sin mas equipo que visor y cámara para dejarse ir flotando a la superficie mientras hace tomas desde la profundidad de un cenote o espiar a otro fotógrafo de exteriores mientras va “cazando” cual es el punto exacto en donde quiere que le hablen las imágenes de las inmensas estalactitas y estalagmitas o asistir a un tradicional llamado alas deidades mayas, pero no tomar fotos con el chaman sino pedirle que le busqué en la genética para hacer una implosión de arrastre y reestructura ...

FIN DE LA PRIMERA PARTE

.... Dicen los que saben que no hay nada mejor para conocer a una persona que compartir un viaje, ahí se dan o no, los códigos de convivencia, los lazos silenciosos de complicidad y las invaluables lealtades; pues con este grupo todavía me queda mucho que contar del parque acuático de XELHA, del impresionante hotel TRES RIOS, DEL buceo en puerto aventuras, de las cavernas subterráneas de Yaax Mul y Nohoch Nah Chich....